¿Cómo te beneficia el senderismo en tu salud?
Mejorando los sistemas cardiovascular, respiratorio y osteomuscular
La caminata es un magnífico entrenamiento cardiovascular. Es un ejercicio aeróbico que ayuda a fortalecer el corazón, manteniendo los valores de tensión arterial en niveles óptimos y ayuda a prevenir la aparición de padecimientos cardíacos.
Además, esta actividad contribuye a estabilizar los niveles de glucosa y colesterol en sangre y a mantener un peso saludable.
El sistema osteomuscular también se beneficia con la práctica de senderismo. La musculatura del tren inferior del cuerpo, sobre todo los glúteos, los cuádriceps y el bíceps femoral se tonifican y fortalecen. Los gemelos también se llevan lo suyo, especialmente si se escala en algunos tramos.
Algo muy interesante, en especial para las mujeres y la prevención de la osteoporosis, es que el trekking aumenta la densidad ósea por lo que los huesos se fortalecen de manera considerable.
De más está decir que al escoger el senderismo vamos a invertir en beneficios para nuestro sistema respiratorio. Lejos de la contaminación de las ciudades el aire del campo, de una calidad incomparable, oxigenará nuestro cuerpo a nivel celular y reducirá las posibilidades de contraer enfermedades respiratorias o ayudará a reducir sus síntomas.
Al mejorar la respiración nuestro sistema nervioso se calmará y la sensación de paz interior inundará nuestra mente.
Eliminar el estrés y fortalecer la concentración
Seguramente te habrá sucedido que tan solo al llegar a campo abierto o acercarte al mar experimentas de inmediato una gran sensación de bienestar. Este es otro de los beneficios del senderismo.
La práctica del mismo acrecienta la producción de endorfinas, sí, esos neurotransmisores que regulan el placer, por lo que proporciona felicidad y por ende reduce los niveles de estrés.
Además, mejora la autoestima, estimula la creatividad y fortalece la concentración.
Si lo piensas bien, la práctica del senderismo aporta al cerebro beneficios similares a la meditación. Al aire libre la mente se relaja y se concentra en un objetivo principal: enfocarse en el camino.
Medir nuestros pasos, detenerse a observar el paisaje y la sensación de llegar al final de la senda proporciona satisfacción y, al mismo tiempo, no deja espacio para que la mente divague en preocupaciones y negatividades.
Produce energía positiva, a tal punto que si nos encontramos buscando solución para un asunto de trabajo puede que luego de relajarnos de esa manera encontremos la respuesta.
Es muy provechoso para personas con tendencia a la depresión, la ansiedad y el insomnio. Además se ha demostrado que la práctica de ejercicios aeróbicos aumenta la capacidad de la memoria, por lo que se recomienda mucho para estudiantes de cualquier nivel de enseñanza.
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